Una vez más

Está visto que la única solución a la gangrena de un miembro infectado es la amputación radical del mismo.

Cuanta miseria, odio e ignorancia radican en las filas de los radicales, racistas y ultraderechistas, disfrazados de protectores del pueblo, independentistas que medran de una España la que ultrajan y humillan a la menor ocasión, con el consentimiento de todos los órganos gubernamentales y de la corona.

Una vez más toca a los andaluces ser mencionados por esta caterva de energúmenos, cierto es que por el Sur abunda de manera excesiva la gente que se aprovecha del PER, cierto es que los inspectores encargados de vigilar este hecho se pasan los días sesteando, como buenos funcionarios, en tanto la gente con ganas de trabajar ve como su trabajo es robado por esos que abusan de una prestación que tiene poco control. Hasta ahí estamos de acuerdo.

El problema viene cuando se nos mete a todos en el mismo saco por parte de unos individuos que llevan décadas viviendo de las ayudas al sector industrial y luego, por supuesto, se quedan con los beneficios generados para su propio provecho volviendo a reclamar nuevas subvenciones.

El problema se agrava cuando quien defiende a los AGRICULTORES CATALANES es alguien nacido en: ALCAMPELL – HUESCA – ARAGON – ESPAÑA, insigne región que si fue reino de las Españas y bajo cuyo protectorado se encontraba el condado de Barcelona. Si, el tal Duran y Lleida no es de Cataluña, así como otros defensores del estatuto.

Ya está bien. Desde aquí levanto mi voz para pedir, o mejor, exigir a quien corresponda la inmediata amputación del miembro gangrenado, junto con todos los órganos que lo componen y ayudan a la putrefacción del mismo. Hay que eliminar de raíz el problema, de entrada boicot a todo lo que huela a catalán, la poca fruta que tengan, para ellos, los cavas el textil, los vehículos, que se lo queden, su maldito orgullo por ser lo que no son, su resentimiento hacia un país que siempre los ha favorecido, o no se acuerdan de cuando Franco les favorecía con todo cuanto tienen, y ellos lamian el culo del dictador para seguir ostentando la primacía industrial. Eso sí era vivir del cuento.

Independencia absoluta para Cataluña y, que sigan los dictados de sus dirigentes; que vivan de lo que produzcan, pero con la frontera bien delimitada y buenos aranceles; que tengan sus propias selecciones deportivas, así siempre será campeón el Barcelona; que busquen trabajadores dentro de la sociedad catalana, la cual nunca ha sido conocida por su afición a doblar el espinazo; y dejad de insultar al pueblo andaluz que siempre os ha sacado las castañas del fuego a la hora de trabajar donde vosotros no queríais.

Termino haciendo un llamamiento a todos los descendientes de los andaluces, extremeños, murcianos y demás gente del Sur, que aún viven allí.

Recordad quienes sois, recordad como vuestros padres o abuelos emigraron para poder vivir, y fueron condenados a un tratamiento casi de esclavo, donde no merecían otro calificativo, por parte de los magnánimos catalanes, que el de CHARNEGO para definir a quien, según ellos, no tenía la categoría de ciudadano igual a los nacidos en aquella tierra. Recordad de donde descendéis y que gracias a los que os antecedieron Cataluña es lo que es, fueron vuestros familiares los que levantaron esa sociedad. No dejéis que quien abuso de ellos y de su esfuerzo levante la voz para acallar la vuestra y arrebataros un derecho ganado con sudor, sangre y lágrimas de tantos andaluces. El derecho a ser el nexo de unión entre dos pueblos que otros se empeñan en separar.